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Relato

La vivienda como instrumento de mejora urbana

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Mediante las políticas residenciales se pueden obtener ciudades más mixtas y compactas, es decir, más justas y sensatas
Cos

La vivienda pública puede ser mucho más que un servicio asistencial y meramente reservado a la base de la pirámide social. Debe entenderse también como un instrumento predistributivo, tan fundamental para el Estado del bienestar como la sanidad pública, la educación pública o el transporte público. Al igual que estos mecanismos de democratización de oportunidades, cuando se extiende a las clases medias, la vivienda pública beneficia al conjunto de la sociedad porque favorece la cohesión, la mixtura y la movilidad entre estratos sociales. Pero, además de democratizar el tejido social, la vivienda pública puede recoser físicamente los tejidos urbanos deshilachados. En efecto, tanto como el espacio público, la vivienda es un potente instrumento de mejora urbana. Mediante las políticas residenciales se puede conferir compacidad y mixtura a los tejidos urbanos.

Atendiendo a la compacidad, hay que compactar los tejidos dispersos y democratizar la posibilidad de habitar los tejidos compactos. Atendiendo a la mixtura, hay que defender la dimensión residencial de los «territorios hiperactivos» y la actividad económica de los «territorios hiperpasivos». Los primeros son lugares excesivamente terciarizados o turistificados, con abundantes puestos de trabajo de día y escasos residentes de noche. Los segundos constituyen la ciudad-dormitorio de la que todo el mundo huye durante la jornada laboral.

Para compactar los tejidos dispersos y monotemáticos e inyectarles nuevos usos, habrá que edificar en espacios públicos excesivamente amplios y, por lo tanto, desoladores, inseguros y de costoso mantenimiento. Estos espacios públicos excesivos serán mucho más útiles si contienen edificios productivos en los polígonos residenciales y viviendas accesibles en los sectores terciarios o administrativos. Por su lado, los tejidos consolidados de la ciudad compacta presentan todavía muchos vacíos disponibles. Son solares que permanecen inexplicablemente vacantes o fincas que, por motivos diversos, no han agotado su edificabilidad. Estas excepciones perjudican a la trama urbana porque menguan su compacidad, afean su paisaje y desaprovechan su capacidad de contener vida.

Mejora urbana